Pensar en tomates es pensar en verano ¿verdad?
Si quieres tener unos tomates sabrosos este verano, es mejor que empieces a hacer un hueco en tu huerta para plantarlas ya en marzo.
Desafortunadamente, hay pocas verduras que sean propensas a más problemas que los tomates. El truco para cultivar tomates de gran sabor es elegir las mejores variedades, cuidar bien las plantas y controlar los problemas antes de que sucedan.
Hoy te damos unos consejos para su cultivo y que así puedas saborear de tomates esta primavera verano.
1. Respeta el espacio entre tomates
Si has decidido empezar los tomates a partir de las semillas, dales a las plántulas mucho espacio para ramificarse.
Esto significa reducir las plántulas a una planta fuerte por espacio o maceta pequeña. Corta las plántulas más débiles y pequeñas en favor del mejor cultivador. Las condiciones de hacinamiento inhiben su crecimiento, los estresa y conduce a enfermedades más adelante.
Cuando ya comienzan a obtener unas hojas verdes fuertes, trasplántalas a macetas de unos 10 centímetros.
2. Dales mucha luz
Las plántulas de tomate necesitan luz intensa y directa. Los días son cortos durante el invierno, por lo que incluso colocarlos cerca de una ventana soleada puede no proporcionarles suficiente luz natural. A menos que las cultives en un invernadero, tu mejor opción es usar algún tipo de iluminación artificial para plantas, durante 14 a 18 horas todos los días.
Cuando veas que están listas para plantarlos afuera, elige la parte más soleada de su huerta como su ubicación.
3. Precalienta el suelo de tu huerta
Los tomates aman el calor. Realmente no comenzarán a crecer hasta que, tanto la temperatura del suelo como la del aire, permanezcan cálidas. Puedes acelerar el proceso en el suelo, cubriendo el área de plantación con un plástico negro un par de semanas antes de plantarlas en la huerta. Esos grados adicionales de calor del suelo se traducirán en tomates más tempranos, por lo que no tendrás que esperar hasta el verano para empezar a disfrutarlas.
4. Entierra bien los tallos
Planta tus plantas de tomate más profundas de lo que vienen en la maceta, hasta la altura de las hojas superiores. Cuando se plantan de esta manera, los tomates pueden desarrollar raíces a lo largo de sus tallos. Y más raíces hacen una planta más fuerte.
Puedes cavar un hoyo profundo o simplemente cavar una zanja poco profunda y colocar la planta de lado. Rápidamente se enderezará y crecerá hacia el sol.
5. Retira las hojas inferiores
Después de que tus plantas de tomate alcancen aproximadamente 80 cm de altura, retira las hojas del pie inferior del tallo. Estas son las hojas más viejas y, por lo general, son las primeras hojas en desarrollar problemas de hongos. A medida que las plantas se llenan, las hojas inferiores reciben la menor cantidad de sol y flujo de aire. Debido a que estas hojas se asientan cerca del suelo, los patógenos del suelo pueden salpicar fácilmente sobre ellas. Eliminarlos ayuda a prevenir que las enfermedades fúngicas se arraiguen. Y además pulverizar semanalmente con té de compost también es muy efectivo para prevenir enfermedades fúngicas. En Matabi tenemos una gran variedad de pulverizadores aptos para fungicidas de origen natural.
6. Riega regularmente
Riega profunda y regularmente mientras se desarrollan los frutos. El riego irregular, (perder una semana y tratar de compensarlo), conduce a la pudrición de la punta de la flor y al agrietamiento y división. La regla general es asegurarse de que tus plantas reciban al menos 0,2 litros de agua por semana, pero durante los períodos cálidos y secos, es posible que necesiten más. Si tus plantas comienzan a verse marchitas durante la mayor parte del día, dales un traguito.
Después de que la fruta comience a madurar, puedes disminuir el riego. Disminuir el agua convencerá a la planta para que concentre sus azúcares, para un mejor sabor. En Matabi tenemos el dosificador ideal - DOSER Evolution - para que todas tus plantas de tomate tengan el mismo ritmo homogéneo de crecimiento. Además de dosificador, es también ¡convertible en pulverizador!
7. Consigue que tus tomates salgan antes
La maduración de los tomates está prácticamente a merced del clima, pero a veces podemos ayudarles.
Cortar las puntas de los tallos principales a principios del verano, ayuda a que los tomates indeterminados (aquellos con fruta disponible continuamente) comiencen su floración.
A los tomates indeterminados les gusta crecer altos antes de comenzar a dar frutos, así que no te alarmes si tus plantas de tomate no florecen durante el primer o segundo mes.
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Fuente vía: The Spruce
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